28/2/07

¿Problemas?

El Gran Maestro y el Guardián compartían la administración de un monasterio zen. Cierto día, el Guardián murió y fue necesario sustituirlo.

El Gran Maestro reunió a todos los discípulos para elegir quién tendría el honor de trabajar directamente a su lado.

-Voy a presentarles un problema -dijo el Gran Maestro. -Y aquél que lo resuelva primero será el nuevo Guardián del templo.

Terminado su cortísimo discurso, colocó un banquito en el centro del salón. Sobre éste puso un jarrón de porcelana carísimo, con una rosa roja para adornarlo.

-He aquí el problema -dijo el Gran Maestro.

Los discípulos contemplaron, perplejos, lo que tenían delante: los diseños sofisticados y raros de la porcelana, la frescura y la elegancia de la flor. ¿Qué representaba todo eso? ¿Qué debían hacer? ¿Cuál sería el enigma?

Después de algunos minutos, uno de los discípulos se puso de pie, y miró a su vez al Maestro y a los alumnos. Después, caminó resueltamente hacia el jarrón, y lo arrojó contra el suelo, destruyéndolo.

-Tú serás el nuevo Guardián -le dijo el Gran Maestro al alumno.

Cuando éste volvió a su lugar, explicó:

-Yo fui muy claro: les dije que ustedes estaban ante un problema. Sin importar lo bello o fascinante que pueda ser, un problema tiene que ser eliminado.

“Un problema es un problema; puede ser un jarrón de porcelana, un lindo amor que ya perdió su sentido, un camino que ha de ser dejado de lado -pero que insistimos en recorrer porque nos reconforta”.

“Sólo hay una manera de lidiar con un problema: atacándolo de frente. En esos momentos, no se puede tener piedad, ni dejarse tentar por el lado fascinante que todo conflicto carga consigo”.

27/2/07

¿Por qué gritar?

Un día Meher Baba preguntó a sus mandalies lo siguiente: - ¿Por que la gente se grita cuando están enojados? Los hombres pensaron unos momentos: Porque perdemos la calma - dijo uno - por eso gritamos.- Pero ¿por qué gritar cuando la otra persona está a tu lado? - preguntó Baba - ¿No es posible hablarle en voz baja? ¿Por qué gritas a una persona cuando estás enojado? Los hombres dieron algunas otras respuestas pero ninguna de ellas satisfacía a Baba. Finalmente él explicó:Cuando dos personas están enojadas, sus corazones se alejan mucho. Para cubrir esa distancia deben gritar, para poder escucharse. Mientras más enojados estén, más fuerte tendrán que gritar para escucharse uno a otro a través de esa gran distancia. Luego Baba preguntó: - ¿Qué sucede cuando dos personas se enamoran? Ellos no se gritan sino que se hablan suavemente,¿por qué? Sus corazones están muy cerca. La distancia entre ellos es muy pequeña. Baba continuó - Cuando se enamoran más aún, qué sucede? No hablan, sólo susurran y se vuelven aun más cerca en su amor. Finalmente no necesitan siquiera susurrar, sólo se miran y eso es todo. Así es cuan cerca están dos personas cuando se aman. Luego Baba dijo: - Cuando discutan no dejen que sus corazones se alejen, no digan palabras que los distancien más, llegará un día en que la distancia sea tanta que no encontrarán más el camino de regreso.
Obra: "El grito", Edvard Munch (1863 - 1944)

26/2/07

La certeza, la escuela y la duda

Buda estaba reunido con sus discípulos cierta mañana, cuando un hombre se aproximó:

-¿Existe Dios? -le preguntó.

-Existe -respondió Buda.

Después del almuerzo se aproximó otro hombre:

-¿Existe Dios? -quiso saber.

-No, no existe -dijo Buda.

Al caer la tarde, un tercer hombre hizo la misma pregunta:

-¿Existe Dios?

-Usted tendrá que decidir -respondió Buda.

Cuando el hombre se marchó, un alumno comentó, indignado:

-Maestro, ¡qué absurdo! ¿Cómo da usted respuestas diferentes para la misma pregunta?

-Porque son personas diferentes, y cada una llegará a Dios por su propio camino. El primero confiará en mi palabra. El segundo hará todo para probar que estoy errado. Y el tercero sólo cree en aquello que es capaz de escoger por sí mismo.

25/2/07

Pan Gu

En el principio, el universo estaba contenido en un huevo, dentro del cual, las fuerzas vitales del yin (obscura, femenina y fría) y del yang (clara, masculina y caliente) se relacionan una con otra.

Dentro del huevo, Pan Gu (o también Pan Ku), formado a partir de estas fuerzas, estuvo durmiendo durante 18.000 años. Al despertar, se estiró y lo rompió.

Los elementos más pesados del interior del huevo se fueron hacia abajo para formar la tierra y los más ligeros flotaron para formar el cielo.

Entre la tierra y el cielo, estaba Pan Gu.

Todos cada día, durante otros 18.000 años, la tierra y el cielo se separaban un poco más más. Pan Gu crecía la misma proporción por lo que siempre se llenaba el espacio intermedio.

Finalmente, la tierra y el cielo llegaron a sus pocisiones defininitvas. Agotado, Pan Gu, se echó a descansar. Y estaba tan agotado que murió. Su cuerpo y sus miembros se convirtieron en motañas. Sus ojos, se transformaron en el sol y la luna. Su carne, la tierra, sus cabellos, los árboles, las plantas, sus lágrimas, ríos y mares. Su aliento, fue el viento, su voz el trueno y el relámpago.

Y por último... las pulgas de Pan Gu... ¡se convirtieron en la humanidad!

24/2/07

Volar

Cuenta una vieja leyenda de los indios sioux que, una vez, hasta la tienda del viejo brujo de la tribu llegaron, tomados de la mano, Toro Bravo, el más valiente y honorable de los jóvenes guerreros, y Nube Alta, la hija del cacique y una de las más hermosas mujeres de la tribu.
- Nos amamos -empezó el joven.
- Y nos vamos a casar -dijo ella.
- Y nos queremos tanto que tenemos miedo.
- Queremos un hechizo, un conjuro, un talismán.
- Algo que nos garantice que podremos estar siempre juntos.
- Que nos asegure que estaremos uno al lado del otro hasta encontrar a Manitú el día de la muerte.
- Por favor -repitieron-, ¿hay algo que podamos hacer?
El viejo los miró y se emocionó de verlos tan jóvenes, tan enamorados, tan anhelantes esperando su palabra.
- Hay algo... -dijo el viejo después de una larga pausa-. Pero no sé... es una tarea muy difícil y sacrificada.
- No importa -dijeron los dos.
- Lo que sea -ratificó Toro Bravo.
- Bien -dijo el brujo-, Nube Alta, ¿ves el monte al norte de nuestra aldea? deberás escalarlo sola y sin más armas que una red y tus manos, y deberás cazar el halcón más hermoso y vigoroso del monte. Si lo atrapas, deberás traerlo aquí con vida el tercer día después de la luna llena. ¿Comprendiste? La joven asintió en silencio.
- Y tú, Toro Bravo -siguió el brujo-, deberás escalar la montaña del trueno y cuando llegues a la cima, encontrar la más brava de todas las águilas y solamente con tus manos y una red deberás atraparla sin heridas y traerla ante mí, viva, el mismo día en que vendrá Nube Alta... salgan ahora. Los jóvenes se miraron con ternura y después de una fugaz sonrisa salieron a cumplir la misión encomendada, ella hacia el norte, él hacia el sur... El día establecido, frente a la tienda del brujo, los dos jóvenes esperaban con sendas bolsas de tela que contenían las aves solicitadas. El viejo les pidió que con mucho cuidado las sacaran de las bolsas. Los jóvenes lo hicieron y expusieron ante la aprobación del viejo los pájaros cazados. Eran verdaderamente hermosos ejemplares, sin duda lo mejor de su estirpe.
- Volaban alto? -preguntó el brujo.
- Sí, sin dudas. Como lo pediste... ¿y ahora? -preguntó el joven- ¿lo mataremos y beberemos el honor de su sangre?
- No -dijo el viejo.
- Los cocinaremos y comeremos el valor en su carne -propuso la joven.
- No -repitió el viejo-. Hagan lo que les digo. Tomen las aves y atenlas entre sí por las patas con estas tiras de cuero... Cuando las hayan anudado, suéltenlas y que vuelen libres. El guerrero y la joven hicieron lo que se les pedía y soltaron los pájaros. El águila y el halcón intentaron levantar vuelo pero sólo consiguieron revolcarse en el piso. Unos minutos después, irritadas por la incapacidad, las aves arremetieron a picotazos entre sí hasta lastimarse.
- Este es el conjuro. Jamás olviden lo que han visto. Son ustedes como un águila y un halcón; si se atan el uno al otro, aunque lo hagan por amor, no sólo vivirán arrastrándose, sino que además, tarde o temprano, empezarán a lastimarse uno al otro. Si quieren que el amor entre ustedes perdure, "vuelen juntos pero jamás atados".

23/2/07

Amistad

Dice una linda leyenda árabe que dos amigos viajaban por el desierto y en un determinado punto del viaje discutieron. El otro, ofendido, sin nada que decir, escribió en la arena: “HOY, MI MEJOR AMIGO ME PEGO UNA BOFETADA EN EL ROSTRO.” Siguieron adelante y llegaron a un oasis donde resolvieron bañarse. El que había sido abofeteado y lastimado comenzó a ahogarse, siendo salvado por el amigo. Al recuperarse, tomo un estilete y escribió en una piedra: “HOY, MI MEJOR AMIGO ME SALVO LA VIDA.” Intrigado, el amigo preguntó: Por que después que te lastime, escribiste en la arena y ahora escribes en una piedra? Sonriendo, el otro amigo respondió: "Cuando un gran amigo nos ofende, deberemos escribir en la arena, donde el viento del olvido y el perdón se encargarán de borrarlo y apagarlo; por otro lado cuando nos pase algo grandioso, deberemos grabarlo en la piedra de la memoria del corazón, donde viento ninguno en todo el mundo podrá borrarlo".

22/2/07

Stars

Hace unos días contemplaba inmóvil las estrellas. Hacía tiempo que no las miraba, las grandes ciudades te lo impiden creando una muralla de luz infranqueable a los ojos. La temperatura no era la correspondiente a una noche de febrero, brindándonos una noche casi primaveral (por un instante me alegré del cambio climático). Camino de casa paré el coche a un lado de la carretera, y caminé un rato hasta llegar junto a una encina. Me tumbé en la hierba boca arriba respirando hondo el aire puro de la noche. Allí, desde un plano privilegiado comprobé lo pequeña que es toda esta cajita de cerillas donde vivimos, y lo insignificante que todo se vuelve al mirar al infinito. A la vez, respirando bajo ese papel pintado de azul me alegré de ser una minúscula pieza de ese engranaje cósmico. Por un momento, me vino a la mente algo que escuché un día: "que el suave aleteo de una mariposa en China puede producir un huracán en California", por un instante pensé que todo es posible. Tuve la tentación de contar estrella por estrella, memorizar su posición en el universo, para poder tal vez, en esos momentos donde todo parece cambiar, comprobar que algo ahí arriba permanece inmutable, inmóvil. No habría sido ni el primero ni el último en hacerlo, o al menos en intentarlo. Allí junto a aquella encina que me filtraba un firmamento limpio y oscuro, no pude evitar caer profundamente dormido, mientras un suave y penetrante olor a romero lo inundaba todo. Al despertar me encontraba con una sensación extrañamente agradable, de esas que tienes tras un sueño que pareció real. Del sueño sólo recuerdo un azul oscuro radiante, plagado de brillo, acaso estrellas, o el reflejo de unas pupilas que miran fijamente, pudieran ser las mías, pudieran ser las tuyas, aunque bien pudieron ser estrellas.
Estoy seguro que no fue un simple sueño, demasiado real, bien pudo ser el futuro en el presente, una especie de déjà vu en tiempo pasado.

21/2/07

La vida al revés

Pienso que la forma en la que la vida fluye está mal. Debería ser al revés: - Uno debería morir primero, para salir de eso. - Luego, vivir en un asilo de ancianos hasta que te echan cuando ya no eres tan viejo. - Entonces empiezas a trabajar. Trabajas por cuarenta años, hasta que eres lo suficientemente joven para disfrutar de tu jubilación. - Fiestas, fiestas negras, parrandas, drogas, alcohol, sales con mujeres o tipos, qué sé yo, hasta que estás listo para entrar en la secundaria. - Después pasas a la primaria, eres un niño que se la pasa jugando sin tener responsabilidades de ningún tipo. - Luego pasas a ser un bebé.Vas de nuevo al vientre materno, pasas los últimos nueve meses de tu vida flotando en líquido amniótico, hasta que tu vida se apaga en un tremendo orgasmo... ¡ Eso sí es vida! Quino (Padre de Mafalda)

20/2/07

Mejor hoy que mañana

"Si por un instante Dios se olvidara de que soy una marioneta de trapo y me regalara un trozo de vida, posiblemente no diría todo lo que pienso, pero en definitiva pensaría todo lo que digo. Daría valor a las cosas, no por lo que valen, sino por lo que significan. Dormiría poco, soñaría más, entiendo que por cada minuto que cerramos los ojos, perdemos sesenta segundos de luz. Andaría cuando los demás se detienen, despertaría cuando los demás duermen. Escucharía cuando los demás hablan, ¡y cómo disfrutaría de un buen helado de chocolate! Si Dios me obsequiara un trozo de vida, vestiría sencillo, me tiraría de bruces al sol, dejando descubierto, no solamente mi cuerpo sino mi alma. Dios mío, si yo tuviera un corazón, escribiría mi odio sobre el hielo, y esperaría a que saliera el sol. Pintaría con un sueño de Van Gogh sobre las estrellas un poema de Benedetti, y una canción de Serrat sería la serenata que les ofrecería a la luna. Regaría con mis lágrimas las rosas, para sentir el dolor de sus espinas, y el encarnado beso de sus pétalos... Dios mío, si yo tuviera un trozo de vida... No dejaría pasar un solo día sin decirle a la gente que quiero, que la quiero. Convencería a cada mujer u hombre de que son mis favoritos y viviría enamorado del amor. A los hombres les probaría cuán equivocados están al pensar que dejan de enamorarse cuando envejecen, ¡sin saber que envejecen cuando dejan de enamorarse! A un niño le daría alas, pero le dejaría que él solo aprendiese a volar. A los viejos les enseñaría que la muerte no llega con la vejez, sino con el olvido. Tantas cosas he aprendido de ustedes, los hombres... He aprendido que todo el mundo quiere vivir en la cima de la montaña, sin saber que la verdadera felicidad está en la forma de subir la escarpada. He aprendido que cuando un recién nacido aprieta con su pequeño puño, por vez primera, el dedo de su padre, lo tiene atrapado por siempre. He aprendido que un hombre sólo tiene derecho a mirar a otro hacia abajo, cuando ha de ayudarle a levantarse. Son tantas cosas las que he podido aprender de ustedes, pero realmente de mucho no habrán de servir, porque cuando me guarden dentro de esa maleta, infelizmente me estaré muriendo." Gabriel García Márquez

19/2/07

El mar ante ti

“… Pero para ser fuertes hay que amarse a uno mismo; para amarse a uno mismo hay que conocerse a fondo, saberlo todo acerca de uno, incluso las cosas más ocultas, las que resultan más difícil aceptar. ¿Cómo se puede llevar a cabo semejante proceso mientras la vida te arrastra hacia delante con su estrépito? Puede hacerlo desde el comienzo solamente quien está provisto de extraordinarias dotes. A los mortales corrientes, a las personas como yo, no les queda otro destino que el de las ramas y los envases de plástico. Alguien –o el viento- , de pronto, te arroja a la corriente de un río: gracias a la materia de que estás hecha, en vez de hundirte, flotas; eso ya te parece una victoria y por lo tanto, inmediatamente, empiezas a viajar, te deslizas veloz según la dirección que te impone la corriente; de vez en cuando, a causa de alguna maraña de raíces o de alguna piedra, te ves obligada a detenerte; allí permaneces un tiempo, golpeada por las aguas agitadas; después el agua sube y te libera, avanzas nuevamente; cuando la corriente es tranquila te mantienes en la superficie, cuando hay rápidos el agua te sumerge; no sabes hacia dónde estás yendo ni te lo has preguntado nunca; en los trechos más tranquilos tienes ocasión de observar el paisaje, las riberas, los matorrales; más que los detalles, ves las formas, los colores, vas demasiado rápido para ver más; después, con el tiempo y los kilómetros, las riberas son cada vez más bajas, el río se ensancha, todavía tienes márgenes, pero por poco tiempo. “¿A dónde estoy yendo?”, te preguntas entonces, y en ese momento se abre ante ti el mar…” "Donde el corazón te lleve", Susana Tamaro (por petición de los lectores)

18/2/07

Hayne, la princesa.

Corre el año 1480, reina en Granada el emir nazarí Abu’l‐Hassan Alí, mientras que allende la frontera, reina en Castilla la hermana del fallecido Enrique IV Trastámara, Isabel la católica. Es primavera, estación mágica en la exuberante vega granadina. Son las doce horas de la mañana y en el bello patio de los Arrayanes, en el espléndido Palacio de la Alhambra, existe una recoleto estanque rodeado de fuentes cantarinas, desde cuyos chorros se proyectan en todas las direcciones enjambres de gotas argentinas que impregnan a todo el jardín circundante de un frescor inenarrable, sólo percibido por los sentidos y que dejan una agradable sensación de humedad. En la intimidad que ofrece ese quedo lugar, se hallan dos hermosas mujeres. La mayor, tomando su diario baño matutino; la menor, descansando delicadamente en el borde de mármol del estanque, mirando distraída las evoluciones de la mayor en la límpida agua perfumada por unos delicados nenúfares. La joven, la princesa nazarí Hayne, sobrina del emir Abu’l‐Hassan Alí, recrea en su memoria la interesante historia de amor de la mayor, su tía Turayya, llamada también despectivamente “la rumiyya”. Sí, a su querida y amada tía Turayya le han puesto tal sobrenombre con desprecio los familiares y valedores de la primera mujer del emir nazarí, uno de los sultanes granadinos más guerreros, por haber sido cristiana antes que musulmana. Hayne mira embelesada a su tía Turayya, pero por su cabeza sigue rondando la historia de la vida de la cautiva Isabel de Solís, hija del noble castellano Sancho Jiménez de Solís, y de la que se enamoró su captor. Fue tan grande el amor que le profesó el gran emir Abu’l‐Hassan a su bella cautiva, que Isabel de Solís no tuvo otra opción que corresponderle profesando la fe islámica y tomando el nombre que eligió para ella su amante sultán: Turayya. De este gran amor y pasión que se profesaron el nazarí y la castellana, Turayya le dio dos vástagos, Saad y Nasr. Desde entonces Abu’l‐Hassan repudió a la primera mujer, Aisha “la Horra”, la Fátima de las crónicas castellanas, que le había dado sus dos hijos mayores, a los que también repudió, Boabdil, que más tarde sería llamado el rey chico, y Yusuf, a quienes recluyó en la Torre Comares, la impresionante ciudadela cuadrada al noroeste del Palacio de la Alhambra, frente al Generalife granadino. Turayya sale de su baño con ademanes delicados y se da cuenta de que su sobrina predilecta, a quien ella llama “su niña”, tiene el pensamiento a una gran distancia de allí. - ¡Mi tierna niña! ¿Por quien penáis? - ¡Ay de mí, querida tía! Mi pequeño corazón ama a un guapo caballero rumí. Hayne se abrazó sollozante al húmedo, pero cálido, cuerpo de Turayya, su tía la sultana. - ¿A un guerrero rumí decís, mi tierna niña? ¡Pronto, contádmelo todo! - ¡En el otoño pasado, acompañando a una partida de jinetes nazaríes ‐yo andaba en secreto y como un guerrero más‐ que iban a realizar una algarada allende la frontera, nos descubrió una numerosa patrulla del Adelantado mayor de la fortaleza de Alcalá la Real! En un momento de la trifulca me encontré cara a cara con aquél caballero rumí. ¡Ay! - ¡Ese suspiro me ha llegado al alma, querida Hayne! - ¡Adorada tía, aquel caballero iba destocado y a cara descubierta! ¡Su melena al aire, el gesto sereno y el porte como el de mi señor el sultán! De dos mandobles con su espada me desmontó y caí de espaldas y de esa guisa quedé totalmente aturdida….., por como se clavaron aquellos varoniles ojos en los míos, cuando descubrió que no era él sino ella. A continuación….., ¡me desmayé! - ¡Mi delicada niña, eso es el amor, cuando llega lo hace sin pedir la venia! Decidme ¿habéis vuelto a ver a vuestro amado rumí? - ¡Para mi desgracia lo vi una sola vez, oculta entre el séquito del Alfaqueque y Secretario personal de vuestro esposo, mi tío el sultán, en la negociación de la última tregua! ¡Qué guapo y apuesto se encontraba luciendo sus propios colores nobiliarios a cuadros sable y oro –negro y amarillo‐¡ Yo estaba con la cara cubierta. ¡Mi corazón quería partir hacia donde se encontraba el objeto de mi amor y colmarle de caricias, besos, palabras tiernas y apasionadas, y…., declararme suya! - ¡Mi tierna niña, nada es imposible! ¿Acaso os habéis olvidado de mi propia historia? - ¡Ah! Adorada tía. ¡Mi amor por don Diego, al que sus huestes llaman “el Bravo”, es tan inmenso como el desierto! - ¡Pues sólo voy a daros un consejo, querida niña! ¿Acaso pueden ponerse puertas al desierto? ¡Id y amadle con la pasión que ponemos las mujeres nazaríes! Dicho esto, Turayya besó delicadamente la aterciopelada frente de su querida sobrina Hayne, su niña, cuyas mejillas se arrebolaron irremediablemente.

16/2/07

In your perfect eyes

Today I did not feel like writing anything, in fact I do not have much time, so I just decided to remember those eyes...Hope y'all enjoy it. I will keep on listening this song...while I take a shower. Thanks God is Friday, but today is a different Friday, I cannot explain why....but sure I will explain all of you soon.
We'll do it all
Everything on our own
We don't need anything or anyone
If I lay here if I just lay here
Would you lie with me and just forget the world?
I don't quite know
How to say how I feel
Those three words are said too much they're not enough
Show me a garden that's bursting into life
Let's waste time chasing cars
Around our heads I need your grace
To remind me to find my own
Forget what we're told
Before we get too old
Show me a garden that's bursting into life
All that I am all that I ever was
Is here in your perfect eyes
They're all I can see
I don't know where
Confused about how as well
Just know that these things
Will never change for us at all
If I lay here if I just lay here, would you lie with me and just forget the world?
Chasing Cars, Snow Patrol (2006)

15/2/07

Rosas: en algún lugar...

Las rosas simbolizan amor, magia, pasión y delicadeza. Las más comunes son las rojas. Son el mensaje eterno de amor y dicen "te amo". Simbolizan también valentía y respeto. Por otro lado, la gente también regala rosas amarillas. Simbolizan alegría y agradecimiento. Además, quieren decir: "Piensa en mí". Pero pueden significar también envidia y celos, incluso un amigo me contó un día que significan infidelidad. Con las rosas hay que ser cauto. A veces te encuentras una rosa, bella rosa, pero vive en un planeta pequeño. Te gusta la rosa, pero no te gusta el pequeño mundo donde vive. Otras veces te encuentras rosas bellas, pero no te gusta el color, y sólo ves sus espinas. Las rosas son bellas generalmente, pero se marchitan con el tiempo. Aunque tal vez sean los ojos que las miran los que se marchitan, los que se apagan con el tiempo. Esos ojos que perdieron su inocencia (la misma que un día les permitió contemplar la belleza en su esplendor, admirándola) son los mismos que miran hacia otra parte, o tal vez, simplemente ya no sean los mismos. "Sé que en algún lugar del mundo, existe una rosa única, distinta de todas las demás rosas, una cuya delicadeza, candor e inocencia, harán despertar de su letargo a mi alma, mi corazón y mis riñones". No sabes donde se encuentra la rosa, ni siquiera sabes si sabrás distinguirla cuando te cruces con ella, pero si por una casualidad (si es que existe la casualidad) la encuentras, por favor confía en ella porque el lugar donde te querrá llevar es el lugar a donde siempre quisiste ir. Por tanto, cuídala, mímala, protege sus raíces de los baobabs, todos sabemos que las raíces de los baobabs son capaces de hacer estallar un planeta.

11/2/07

Pequeñas grandes cosas

Un hombre golpeaba fuertemente una roca, con rostro duro, sudando. Alguien le preguntó: - ¿Cuál es su trabajo? Y contestó con pesadumbre: - ¿No lo ve? Picar piedra. Un segundo hombre golpeaba fuertemente otra roca, con rostro duro, sudando. Alguien le preguntó: - ¿Cuál es su trabajo? Y contestó con pesadumbre: - ¿No lo ve? Tallar un peldaño. Un tercer hombre golpeaba fuertemente una roca, transpirado, con rostro alegre, distendido. Alguien le preguntó: - ¿Cuál es su trabajo?". Y contestó ilusionado: -Estoy construyendo una catedral.

7/2/07

Mensajes

Me gustan los mensajes de madrugada, las llamadas perdidas, las voces en el contestador. Me gusta levantarme pronto un sábado y encontrar un mensaje de “¿dónde estás?, nos vemos?”, “te echo de menos”, “tengo ganas de verte”, “te llamaba para decirte que ya me voy a dormir”. Me gustan los mensajes de buenas noches, los de madrugada, los de buenos días. Me gusta la sorpresa. Me gusta lo compulsivo. Lo que se hace sin pensar. Supongo que en general es que me gustan los mensajes. De texto o de voz. Del que no me esperaba, del que me alegra, del que me apetece tanto como a ti. O más. Más. Del que ya no nos llega...

6/2/07

Love looks not with the eyes...

How happy some o'er other some can be!Through Athens I am thought as fair as she.But what of that? Demetrius thinks not so;He will not know what all but he do know.And as he errs, doting on Hermia's eyes,So I, admiring of his qualities.Things base and vile, holding no quantity,Love can transpose to form and dignity.Love looks not with the eyes, but with the mind;And therefore is wing'd Cupid painted blind.Nor hath love's mind of any judgment taste;Wings and no eyes figure unheedy haste:And therefore is love said to be a child,Because in choice he is so oft beguil'd.As waggish boys in game themselves forswear,So the boy Love is perjur'd everywhere:For ere Demetrius look'd on Hermia's eyne,He hail'd down oaths that he was only mine;And when this hail some heat from Hermia felt,So he dissolv'd, and showers of oaths did melt.I will go tell him of fair Hermia's flight;Then to the wood will he to-morrow nightPursue her; and for this intelligenceIf I have thanks, it is a dear expense:But herein mean I to enrich my pain,To have his sight thither and back again.How happy some o'er other some can be!Through Athens I am thought as fair as she.But what of that? Demetrius thinks not so;He will not know what all but he do know.And as he errs, doting on Hermia's eyes,So I, admiring of his qualities.Things base and vile, holding no quantity,Love can transpose to form and dignity.Love looks not with the eyes, but with the mind;And therefore is wing'd Cupid painted blind.Nor hath love's mind of any judgment taste;Wings and no eyes figure unheedy haste:And therefore is love said to be a child,Because in choice he is so oft beguil'd.As waggish boys in game themselves forswear,So the boy Love is perjur'd everywhere:For ere Demetrius look'd on Hermia's eyne,He hail'd down oaths that he was only mine;And when this hail some heat from Hermia felt,So he dissolv'd, and showers of oaths did melt.I will go tell him of fair Hermia's flight;Then to the wood will he to-morrow nightPursue her; and for this intelligenceIf I have thanks, it is a dear expense:But herein mean I to enrich my pain,To have his sight thither and back again. "A Midsummer Night's dream" W. Shakespeare